Mayor organización latina de EEUU condena el maltrato a senador esposado en Los Ángeles

LULAC y ACLU rechazan la expulsión violenta del senador Alex Padilla durante una conferencia de prensa en Los Ángeles, destacando la criminalización de comunidades latinas y el ataque a derechos fundamentales

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Los Ángeles (EE.UU.), 12 jun (EFE).- LULAC, la más antigua organización hispana en EE.UU., condenó este viernes la expulsión forzosa del senador por California Alex Padilla de la conferencia de prensa en Los Ángeles de la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, en la que el legislador fue empujado y esposado.

"Lo que le sucedió al senador Padilla refleja lo que les está sucediendo a nuestras familias. La imagen de agentes de seguridad sacando a rastras a un senador latino de un evento público es sorprendentemente similar a lo que nuestra comunidad está sufriendo en todo el país", dijo Ramón Palomares, presidente nacional de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC).

El activista dijo que el incidente ocurrido este jueves fue "un ataque calculado contra el derecho fundamental a cuestionar el poder del gobierno".

Padilla se encontraba en una instalación federal de Los Ángeles para recibir un informe de un general cuando supo que en el mismo piso Noem ofrecía una conferencia de prensa junto a otras agencias federales, sobre las redadas migratorias y los arrestos en las manifestaciones por lo que quiso preguntar directamente a la alta funcionaria.

"Estuve allí pacíficamente. En un momento dado tuve una pregunta y comencé a hacerla. Casi de inmediato me sacaron a la fuerza de la sala. Me obligaron a tirarme al suelo y me esposaron", explicó ayer Padilla, que hizo historia al ser el primer hispano elegido al Senado por California.

Aunque el senador, de raíces mexicanas, no fue arrestado, el incidente ha causado una ola de rechazo entre los activistas y el Partido Demócrata.

Palomares advirtió de que cuando las comunidades latinas son criminalizadas y los funcionarios electorales son atacados por exigir respuestas, todos los estadounidenses "deberían darse cuenta de lo que está sucediendo" y alzar la voz.

A las voces de rechazo por el trato a Padilla, se sumó la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), que calificó el atropello como un acto "antiestadounidense", según dijo Anthony Romero, director ejecutivo de la organización en un comunicado.

"La agresión contra el líder latino de mayor rango del país pinta un vívido retrato de una administración cada vez más descontrolada y que se comporta como autócratas violentos", agregó Romero.

Tanto LULAC como ACLU han subrayado los continuos ataques del presidente estadounidense Donald Trump y sus funcionarios a universidades, jueces, líderes sindicales, estudiantes, organizaciones sin fines de lucro, bufetes de abogados, inmigrantes y ciudadanos comunes, que se oponen a sus políticas.

"Todos los estadounidenses deben exigir una rendición de cuentas y justicia en nombre del senador Padilla y de los muchos otros que han sido blanco de la Administración por ejercer su derecho amparado por la Primera Enmienda para denunciar las políticas inconstitucionales de este gobierno", puntualizó el director de ACLU. EFE

(foto)

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