Continúa la búsqueda de la alférez FAP Ashley Vargas: últimas noticias del quinto día de las labores de rescate en Paracas

El padre de la alférez de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), Ashley Vargas, no pierde la esperanza y sigue con la búsqueda de su hija, desaparecida desde el martes 20 de mayo tras la caída de la aeronave de instrucción KT-1P en el mar de Paracas. “No sabemos nada, estamos como en el día uno”, confesó Édgar Vargas Escobedo, quien asegura que mantiene la fe de volver a abrazar a Ashley, una joven de 24 años descrita por su familia como dulce y muy aplicada.

La comunidad y seres queridos se han movilizado para apoyar la búsqueda. Sus compañeros organizaron una marcha llamada ‘UnidosPorAshley’ en Pisco, mientras en su tierra natal, Leymebamba, miles participan en vigilias y cadenas de oración por su pronta aparición. Desde temprano, voluntarios, buzos y rescatistas partieron desde la Plaza de Chacos para sumarse a la búsqueda a pie, equipados con balones de oxígeno y vehículos 4x4, con la esperanza de traerla de regreso sana y salva.

Identifican a la persona que llamó y dio pistas falsas del paradero de Ashley Vargas

La piloto de la Fuerza Aérea del Perú desapareció en Paracas el pasado martes 20 de mayo cuando piloteaba una aeronave de instrucción. Su familia se encuentra en Pisco tratando de buscarla

Por Ricardo Mc Cubbin

La familia de Ashley Vargas ha logrado identificar a la persona que llamó para afirmar que había encontrado a la alférez de las Fuerzas Armadas, luego de haberse extraviado por cuatro días al pilotear una aeronave. La falsa llamada fue dada a conocer a los medios por el padre y tío de la joven, pero luego tuvieron que desmentir debido a que los supuestos pescadores que habían hallado a la alférez empezaron a pedir dinero para ‘trasladarla’ a tierra.

La Red de Mujeres Emprendedoras y Empresarias de Amazonas emitió un pronunciamiento público en el que demandan a las autoridades nacionales, incluyendo la Presidencia del Consejo de Ministros, el Congreso de la República, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables y el Ministerio Público, que intensifiquen la búsqueda y rescate de Ashley Vargas Mendoza, desaparecida tras un siniestro aéreo ocurrido hace cinco días.

La joven es natural del distrito de Leymebamba, en la provincia de Chachapoyas, y las integrantes de esta organización expresan su profunda preocupación ante la ausencia de información oficial y el llamado a que se garantice la operatividad de los vuelos de la Fuerza Aérea del Perú para acelerar el rescate.

Además, el colectivo de mujeres amazonenses hace un enérgico llamado a la presidenta Dina Boluarte para que tome acciones urgentes y se pronuncie públicamente sobre este caso, reafirmando la responsabilidad del Estado peruano en proteger a sus ciudadanos y en facilitar los recursos necesarios para la búsqueda.

Un equipo de Bomberos Navales de Huacho llegó hoy a la Reserva Nacional de Paracas alrededor de las 18:30 horas para apoyar en la búsqueda y rescate de la piloto Ashley Vargas. Los rescatistas arribaron con dos zodiacs, embarcaciones inflables que permiten maniobrar con rapidez y estabilidad en zonas costeras y en condiciones difíciles, facilitando el trabajo en el mar para operaciones de emergencia.

El zodiac es una embarcación ligera, generalmente hecha de materiales resistentes y con cámara de aire inflable que le proporciona flotabilidad adicional. Su diseño versátil y capacidad para navegar en aguas poco profundas o turbulentas la convierte en una herramienta esencial para equipos de rescate marítimo

El Ejército del Perú ha intensificado sus esfuerzos en la búsqueda de la Alférez FAP Ashley Vargas Mendoza, desplegando un helicóptero y un equipo especializado compuesto por miembros de la 1ra Brigada de Fuerzas Especiales y del Escuadrón de Reconocimiento Aeroterrestre N° 21 de la 1ra Brigada Multipropósito.

El despliegue busca fortalecer las operaciones coordinadas para encontrar a la Alférez Vargas Mendoza, quien se encuentra desaparecida en circunstancias que aún se investigan.

La Marina de Guerra del Perú intensificó las labores de búsqueda para encontrar a Ashley Vargas, la joven piloto de 25 años desaparecida en la Reserva Nacional de Paracas. Para ello, desplegaron un equipo de 10 buzos especializados, además de utilizar vehículos, embarcaciones y el apoyo constante de la Capitanía de Puerto de Pisco, en una zona costera desértica de difícil acceso. Estas acciones se llevan a cabo desde el buque BAP Zimic, que coordina el operativo en la región.

La Reserva Nacional de Paracas, conocida por su terreno accidentado y sus aguas traicioneras, representa un desafío para las labores de rastreo. La Marina mantiene patrullajes constantes y emplea equipos especializados para cubrir la mayor área posible, con el fin de hallar a la piloto. La población local y las autoridades permanecen en alerta, esperando que la búsqueda arroje resultados positivos en las próximas horas.

Un testigo presencial entregó detalles que podrían ser fundamentales para esclarecer la desaparición de Ashley Stacy Vargas Mendoza. Según la declaración, la mujer escuchó un fuerte sonido y luego una explosión cerca de las 4 de la tarde del martes 20 de mayo, justo cuando una avioneta sobrevolaba la zona. “Estábamos descansando de nuestra labor cuando oímos un avión que aceleró y, poco después, una explosión. Vimos humo cerca del cerro y sospechamos que era la aeronave”, relató al noticiero 24 Horas.

Este relato cobra relevancia en las labores de búsqueda, pues coincide con la última ubicación conocida del joven alférez y podría indicar que la aeronave sufrió un accidente en ese lugar. Las autoridades continúan con las investigaciones para confirmar la información y dar con el paradero de Vargas Mendoza.

De acuerdo al último comunicado de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), las labores de búsqueda del Alférez Ashley Vargas Mendoza, tripulante de la aeronave KT-1P desaparecida, se desarrollan de manera ininterrumpida desde el 20 de mayo.

Para esta operación se ha desplegado un amplio despliegue de recursos, que incluye helicópteros Enstrom y MI-17 con capacidad de visión nocturna; aeronaves Fairchild C-26 equipadas con sistema FLIR, Beechcraft King Air 360C (ambulancia aérea) y Beechcraft B200 King Air de la Marina de Guerra del Perú.

Además, se emplean patrullas de operadores especiales con capacidades terrestres y náuticas, vehículos terrestres, embarcaciones y el buque BAP Zimic con sensores de búsqueda submarina, así como diez buzos de la Marina de Guerra y personal especializado en rescate en zonas escarpadas.

La Fuerza Aérea también confirmó la ubicación de dos fragmentos de la nave ubicados al norte de la playa Mendienta, de la Reserva Natural de Paracas.

La fiscal Gladys Matilde Torres Lobato, de la Fiscalía Provincial Penal de Pisco, solicitó informes técnicos sobre el estado de la aeronave, la capacitación de los pilotos y las condiciones en las que se desarrolló el vuelo, con el fin de identificar posibles responsabilidades en el incidente.

Durante la última jornada de las labores de ubicación y rescate, la fiscal Gladys Torres supervisó el despliegue de medios, realizó un recorrido por la zona de búsqueda y sobrevoló el área en un helicóptero Mi-17, constatando el esfuerzo articulado entre la FAP y las instituciones participantes.

José Ocampo, abogado de la familia de Ashley Vargas, destacó la importancia de esclarecer si el asiento de eyección de la aeronave funcionó correctamente o si, por falta de entrenamiento o fallas técnicas, Ashley no pudo autoexpulsarse durante la caída del avión. Señaló que la investigación preliminar ya está en marcha y que la familia exige conocer la verdad para poder cerrar esta difícil etapa.

En entrevista con Exitosa, Ocampo informó que el esfuerzo logístico para la búsqueda se ha incrementado en los últimos días, aunque hasta ahora no se ha encontrado ningún rastro que confirme su paradero. Recalcó que la Fiscalía, la Fuerza Armada y el Ministerio de Transportes deben realizar una investigación exhaustiva y transparente sobre el mantenimiento y el funcionamiento de la aeronave, en especial sobre el sistema de eyección, para que la familia pueda saber la verdad sobre lo ocurrido.